No necesitas que sea año nuevo para empezar nuevos retos y propósitos. No necesitas empezar un lunes, ni empezar el 1 de Enero, ni esperar a verano o a tener el tiempo suficiente. El mejor momento para proponerte un reto saludable es ahora mismo.
Hoy más que nunca sabemos que la epigenética tiene consecuencias importantes sobre la salud y calidad de vida de las personas. Dentro de la epigenética influyen factores como; la alimentación, la actitud y estado emocional, la actividad física, la contaminación y productos químicos, etc.
Además de la influencia sobre nuestro cuerpo y nuestro sistema inmunológico, crear nuevos retos mejora la salud cerebral. Investigadores de la Universidad de Texas en Dallas, han visto que personas mayores que afrontan nuevas actividades y retos positivos generan mayor actividad cerebral. En este estudio han observado que cuanto más desafiante era el reto mayor capacidad de modular la actividad cerebral de forma positiva, y se mantenía más en el tiempo.
Por otro lado, William James, uno de los padres de la psicología moderna, menciona en una de sus obras que aprender nuevas habilidades puede tener un efecto en la estructura física del cerebro, modificándolo y estableciendo nuevas relaciones y circuitos neuronales.
El cerebro es un órgano moldeable y cada destreza aprendida, lengua estudiada o experiencia vivida, reconfigura nuestro mapa cerebral.
De la misma forma que podemos mejorar nuestra condición cognitiva, también podemos mejorar nuestra condición física. La actividad física mejora nuestro rendimiento, el estado anímico, el descanso, la salud intestinal, regula el metabolismo de los carbohidratos y participa en los cambios epigenéticos (https://revistageneticamedica.com/2014/12/14/actividad-fisica-epigenetico-musculo/ ), etc.
Sea cual sea tu propósito, lo realmente importante es llevarlo a cabo y mantenerlo en el tiempo.
Se dice que se necesitan 21 días para generar un hábito nuevo. Y para empezar un nuevo reto y generar un hábito se necesita asociarlo con algo que realmente motive, y que esté relacionado con valores importantes para ti. Visualiza primero; por qué lo haces y para qué lo haces. Una vez que tengas esto claro y generes un compromiso contigo mismo, necesitas disciplina y no rendirte. Los primeros días se hacen cuesta arriba y enseguida encontramos escusas para abandonar, pero una vez que generes el hábito y tu cuerpo empiece a notar los beneficios es mucho menos probable el abandono.
No existe la receta milagrosa, cada uno tiene la capacidad de tomar el control de su vida y asumir el compromiso consigo mismo.
Empieza por crear una lista de hábitos que;
- quieres mantener
- otras que quieres eliminar
- y otras que quieres mejorar o desarrollar
No tienen porque ser grandes cambios, pueden ser pequeños cambios que afecten de forma positiva tu vida.
Aquí os dejo con una lista de pequeños cambios y pueden generar grandes diferencias;
1- No te quedes pegado a las sábanas e intenta madrugar para aprovechar mejor el día.
Sea lunes, miércoles, sábado o domingo, mi hora tope suele ser las 9 de la mañana. El día cunde muchísimo más.
2- No te saltes el desayuno; es fundamental para empezar bien el día.
Intento tener preparado el desayuno si tengo que madrugar mucho o me hago un «take-away».
3- Haz algo de ejercicio todos los días, aunque sea salir a caminar con cambios de ritmo.
Aunque sean 15 minutos, extiendo me esterilla y me pongo en casa en cualquier rincón, o fuera de ella en la playa, parque,…
4- Cambia los alimentos procesados por la versión más natural.
En mi cocina prácticamente no hay alimentos procesados.
5- Añade algún alimento nuevo cada semana, alguno que no hayas probado aún. Siempre alimentos de calidad y saludables; endivias, apio, hinojo,…
Este es un limón!!!!! que encontré en la tienda eco; URBANIC en progreso, Vigo.
6- Mantener una buena hidratación; reduce o elimina las bebidas y alimentos deshidratantes (café, sal,…) y aumenta el consumo de agua e infusiones.
A mi personalmente me cuenta mucho beber, me tengo que obligar. Por eso hago infusiones y bebidas calientes en invierno, condimentadas con canela, jengibre,… Utilizo poca sal y tiro más de condimentos.
7- Tener siempre en la mesilla un libro, y empezarlo!!.
Yo tengo varios; uno de yoga, dos de Itziar González De Arriba y varios de cocina.
8- Evitar estar muchas horas sentado, o no más del que tengas que estar en tu lugar de trabajo.
Yo tengo la suerte de no trabajar sentada, aunque sí paso horas en el ordenador. Cuando llevo un tiempo me tiro en la esterilla!!
9- Haz actividades al aire libre, a poder ser lejos de edificios y carreteras.
Algunos días voy a correr por la playa, y cuando puedo me escapo al monte.
10- De vez en cuando hacer alguna escapada aunque sea cerca; despeja la mente, conoce sitios y gente nueva.
Sea por formación o por ocio intento escapar de vez en cuando. Te despeja la mente, te carga pilas y vuelves con nuevas ideas y diferentes puntos de vista.
Me encanta viajar en avión, me alucinan los aeropuertos. Con 5 años me subí por primera vez a un avión y siempre quise ser azafata de vuelo. Mi padre estuvo 5 años embarcado en un barco de pasaje y dio la vuelta al mundo varias veces. De él aprendí muchísimo y de él conservo fotos por esquinas diversas del mundo. Viajar para mi es parte importante de la escuela de la vida.
11- Planea tu día y crea un esquema mental de lo que vas hacer. De esta forma pierdes menos tiempo y evitas situaciones de estrés.
Yo tengo que trabajar y vivir con agenda porque tengo tantas cosas en la cabeza que enseguida me despisto!! Y aún así a veces me pasa!
12- Evita utilizar plásticos, químicos y parabenos en tu día a día, tanto en la cocina, como en el baño, etc.
Cuando me apareció la dermatitis hice un curso de 3 meses de cosmética natural y eliminé más del 70% de plásticos y productos químicos de mi casa. Ahora ya no hago tanta cosmética natural porque no tengo tiempo, pero compro productos de buena calidad y con garantía ECO y libre de parabenos.
13- Apúntate a una actividad nueva; sea el baile, puntura, un bautismo de mar, etc. Experimenta nuevas sensaciones y sal de tu zona de confort.
Casi por casualidad aparecí un día en Koh Tao, una pequeña isla al Este de Tailandia, plagada de escuelas de buceo. Y pensé ¿Qué puedo hacer aquí?; pues un curso de buceo, ajjajjajaj! Acabé sacándome el Open Water para bucear a 18 metros bajo el agua.
Fue una experiencia tan bonita que a los pocos meses me saqué el Advance para bajar a 30 metros.
Buceando viví unas de las experiencias más bonitas de mi vida!!
14- Afróntate a uno de tus miedos; cuando te afrontas a él, este desaparece.
Yo le tenía miedo a las agujas, y aún le tengo respeto. Así que me fui a Burgos a sacarme el curso de punción seca; una técnica invasiva que utiliza las agujas de acupuntura para inactivar puntos gatillo.
15- Busca el sitio más alto de ciudad, pueblo o villa y disfruta de una atardecer. A veces las experiencias más bonitas las tenemos al lado de casa.
En la zona en la que vivo conozco prácticamente todas las alturas y sitios encantados para ver puestas de sol increíbles.
En su día en Formentera me levanté a las 4.30 de la mañana para ir a ver amanecer en la playa. Espectacular!!
Me parece un auténtico regalo de la naturaleza.
16- Mantén una perspectiva positiva. Evita todo aquello que te genera mala energía o que te pone de mal humor; sean cosas o personas. Y si no puedes eliminarlas haz algo positivo que lo compense.
Cuando tengo un mal día me pongo el club de la comedia!! jajajjajaj! Y a veces si tengo un buen día también!!! 😉
17- Evita estar delante de la televisión y/o demás pantallas durante largas horas. Verás cuando tiempo te «sobra»!!
Yo no tengo televisión en casa desde hace 5 años. Ni me acuerdo de ella.
18- Sé impecable con tus palabras y con tus actos, independientemente de las circunstancias y de la persona que tengas delante.
Hace años me regalaron un libro que sigo conservando y que me ha ayudado mucho, tanto a nivel personal como profesional. A lo largo de estas páginas se explica cuales son los 4 acuerdos que debes mantener contigo mismo; – sé impecable con tus palabras, – no te tomes nada como algo personal, – no hagas suposiciones, – haz siempre lo máximo que puedas.
19- Haz algún gesto voluntariado, con personas o animales que lo necesiten. Dona cosas que no utilizas, o que utilices pero no sean imprescindibles para tu vida, a lo mejora para otra si lo es.
En Tailandia me pasé un par de días en una reserva de elefantes, colaborando con la gente que vive en la reserva; dándoles de comer, ayudando a bañarlos, mimarlos,… Estos animales sufren durante muchos años abusos y maltratos para servir a los turistas como animal de paseo entre otras cosas. Una vez que no sirven para sus tareas los abandonan, muy mayores o lesionados y a veces enfermos.
En estas reservas se aseguran de que el animal tenga todos los cuidados necesarios para recuperarse y llevar una vida «feliz».
20- Practica respiraciones conscientes antes de meterte en cama, o antes de dormir.
Muchas veces, sobre todo cuando noto tengo mucho «bombardeo mental» y me cuesta coger el sueño, suelo poner una meditación al acostarme. No la suelo acabar porque me quedo frita!!
21- Respeta las horas de sueño, y consigue un sueño reparador. Intenta dormir al menos 7 horas diarias.
Antes de las 12 intento estar durmiendo. Antes no lo hacía y me daba el bajón a media tarde. Por norma respeto las horas de sueño porque si no baja mi rendimiento y me siento más despistada.
Rompe la monotonía, sal de tu zona de confort, genera hábitos que te hagan sentir mejor y recuerda;
Tu cuerpo es el reflejo de tu estilo de vida.