Siguiendo un poco la publicación del covid-19 y el brécol, os voy a dejar diferentes formas de cocinar el brécol. De esta manera, sobre todo para las personas que no le gusten demasiado, pueden experimentar en la cocina.
Si queréis indagar un poco más en el concepto de FISIOGENÓMICA y lo que esto puede aportar para la salud en general, y en la actualidad, como forma de combatir el Covid-19, podéis entrar en este link:
http://fisiogenomica.com/#coronavirus
Esto no quiere decir que ahora haya que comer brécol a todas horas, ya que al igual que todos los alimentos, el brécol tiene sus indicaciones y sus contraindicaciones.
Sus indicaciones, a parte de las ya expuestas en otras publicaciones, son:
- Es un potente Anticancerígeno, por su contenido en isotiocianatos que estimulan las enzimas desintoxicantes y antioxidantes.
- Su contenido en fitoesteroles y fibra ayuda a regular los niveles de colesterol y por lo tanto, también actúa como protector de patología cardiovascular.
- Es rico en antioxidantes y alto en vitaminas E, B, A, K y C, por lo que fortalece nuestro sistema inmunológico, mejora nuestra visión, el envejecimiento celular y tiene efecto antiinflamatorio.
Algunas de sus contraindicaciones son:
- Está contraindicado con la toma de ciertos medicamentos para regular la coagulación sanguínea (Sintron), ya que el brécol contiene grandes cantidades de filoquinona (fuente de vitamina K) que participa en la coagulación sanguínea.
- Por su contenido en fibra y compuestos azufrados (que pueden causas flatulencias y dificultades digestivas) estaría contraindicado en problemas digestivos como; gastritis, problemas de Vesícula Biliar y algunas patologías Inflamatorias Intestinales (EII) sobre todo en fases agudas.
- Debe evitarse en patología de riñón por su alto contenido en potasio, sobre todo si el brécol se consume crudo (zumos,..)
- Las crucíferas en general contienen compuestos bociógenos, que bloquea la utilización y absorción del yodo alterando la función tiroidea. Por lo que estaría contraindicado en casos de Hipotiroidismo.
En cuanto a su cocción, cuando cocinamos brécol, una de sus características más conocidas es el aroma que desprende. Esto es debido a su contenido en compuestos azufrados, que se liberan de forma exagerada durante la cocción y sobre todo con el hervor. Para mitigar este olor, le podemos echar unos trocitos de apio al agua de la cocción. Y por otro lado, en el cocinado le podemos añadir hinojo y comino para favorecer su digestión y evitar flatulencias.
RECETAS
En general, está considerado como una de las hortalizas con mayor valor nutricional por unidad de peso de producto comestible.
BRÉCOL REBOZADO
Ingredientes
- Un brécol
- Harina de garbanzos
- Agua
- Condimentos; sal, comino, curry
Elaboración
En un bol mezclamos 4 cucharadas de harina de garbanzos y 7 cucharadas de agua. Removemos bien para que no queden grumos y le añadimos los condimentos; sal marina sin refinar, un poco de comino (poca cantidad) y curry en polvo al gusto.
Lo hago de esta forma para no abusar tanto del huevo y como alternativa a los que no lo pueden comer, pero se podría hacer con un rebozado normal.
Mientras dejamos esta mezcla a reposo, durante 30 minutos aproximadamente, lavamos bien el brécol. Retiramos el tallo y cortamos el resto en pequeños trozos. Cuantos más pequeños mejor para que se haga bien por dentro y más rápido.
Rebozamos los trocitos de brécol con la mezcla de harina de garbanzo, y lo hacemos en la sartén, en la plancha o al horno. Si lo hacemos al horno queda más seco, así que luego lo podéis acompañar con una salsita (con aguacate, esparraguesa, etc.)
Os aconsejo comerlo en caliente y recién hecho, porque luego la textura no es tan rica.
BRÉCOL DESMIGADO
Ingredientes
- Un brécol
- Condimentos: sal marina sin refinar, comino, pimienta negra, ajo en polvo.
- Uvas pasas y almendras
- aceite de oliva virgen extra
Elaboración
Cortamos el brécol y lo colocamos en una trituradora o termomix hasta dejarlo “desmigado”.
Mezclamos el resultado con los condimentos que más nos gusten; en este caso utilicé un poquito de comino (para mejorar la digestión del brécol), un poquito de sal marina sin refinar, pimienta negra, algunas uvas pasas, unas almendras crudas y un chorrito de aceite de oliva.
Lo podemos cocinar al horno o en la sartén.
Esparcimos bien la mezcla en una sartén (intentando que quede todo bien uniforme) con papel de horno por debajo y lo dejamos horneando a 180º por ambos lados. Dejamos que se haga durante 15-20 minutos, vigilando que no se queme.
Lo podemos hacer también en una sartén con un poco de aceite, y revolviendo bien el brécol para que se haga bien por todo.
ZUMO CON BRÉCOL Y OTROS
En general no es aconsejable abusar de los zumos, e incluso de estos tampoco. Es mejor tomar poca cantidad que grandes cantidades con mucha frecuencia.
Pero, este por ejemplo, es un zumo antiinflamatorio y un buen antídoto para la resaca!!
Podemos hacer un zumo con diferentes ingredientes.
En este caso utilicé:
Ingredientes:
- 1 pera
- 3 ramas de api,
- un trocito de jengibre
- 3 rabanitos
- unas gotitas de equinácea
Elaboración:
Para su elaboración necesitamos una extractora de zumos. La extractora, a diferencia de las licuadoras, aprovecha mucho más el contenido de los alimentos.No es aconsejable abusar de estos zumos
Lavamos bien los ingredientes y los troceamos.
Los pasamos por la extractora, y si vemos que el sabor es muy fuerte podemos rectificar con algún alimento.
Al final de la extracción le añadimos unas gotitas de equinácea.
Enjoy your meal!!